C-72R (Mònica Buxó i Marta Domínguez) «Trayectorias»

Las propuestas del grupo C-72R enmarcan en el arte conceptual y se materializan a través de un lenguaje y una poética propia que se mueve desde el accionismo (arte de acción) en la instalación. Se trata de un arte colectivo generado y llevado a cabo por las tres mujeres integrantes del grupo.

Los contenidos de sus acciones a menudo tienen como objetivo la disolución de los patrones habituales, conformistas del comportamiento y la propuesta de prácticas de entrenamiento perceptivo y creativo, así como una visión crítica y de toma de conciencia social. Este enfoque entra en diálogo con el entorno donde se produce la acción: el significado que aporta una determinada ubicación o contexto, su función actual, su historia, y los elementos propios de este espacio, a menudo tomados como referentes. Las acciones tienen una concepción de obra abierta, no exponen un contenido literal cerrado, sino que es el espectador el que con un papel activo debe interpretar el sentido de la propuesta.

La acción Trayectorias quiere ser una celebración para reivindicar y conmemorar la memoria de las mujeres que tienen una relación con el pasado de las artistas, y por extensión, a reivindicar y celebrar la memoria de todas aquellas mujeres que las han precedido y gracias a las que las C72R, son quienes son.

Mónica Buxó y Marta Domínguez, dos de las tres integrantes del grupo C-72R, realizaron un ejercicio de memoria con un fuerte carácter conceptual, con su correspondiente dimensión plástica y simbólica. Por turnos, dijeron en voz alta su nombre y el de todas las mujeres de su linaje familiar de las que podían recordar el nombre o algún apellido. Para cada nombre, clavaban una estaca en la viña, para posteriormente unir todas las estacas de cada familia con un cordel rojo, simbolizando el vínculo sanguíneo. Con este gesto mostraban el proceso mediante el cual el sistema patriarcal se encarga de hacer desaparecer las mujeres a través del arrinconamiento de su apellido en el árbol genealógico. Además, representaban físicamente la escasez de los nombres recordados de las mujeres de la familia y hacían así patente el olvido.
 
A continuación invitaron a los asistentes que quisieran decir el nombre de todas las mujeres de su familia que pudieran recordar. La participación fue numerosa tanto en mujeres como en hombres y, en todos los casos, se reflejaba el mismo hecho: la desaparición de los apellidos de las madres y, por tanto, el olvido de las mujeres de todas las familias. Para concluir la acción, la jornada y el ciclo, las artistas dieron a los asistentes un folleto donde recogían el trabajo de investigación biográfica que hicieron con relación a sus respectivos femeninos árboles genealógicos. También repartieron un vaso de vino a los presentes y propusieron un brindis en recuerdo de todas las madres que son borradas mediante la marginación de sus apellidos.
 

Créditos:
Fecha y lugar: 21 de agosto 2021  
Fotografía: ARBAR/Ramon Guimaraes 
Texto: C-72R /ARBAR/

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